los años y unos acordes de guitarra

es curioso como en el desenfreno de estos días tan "rápidos" nos olvidamos de ciertas cosas, cosas que relajan, que nos hacen feliz o nos hacen sonreír... es curioso como todo eso pasa a un segundo, tercer o cuarto plano por que lo único importante es llegar, siempre llegar a algo, llegar a lo siguiente, sin saber ciertamente donde es... y de pronto llegando... me encontraba allí en una de esas cosas que había llegado por correr y corriendo tan rápido que el concepto disfrutar lo había dejado atrás y aún me tenía que alcanzar...

fue entonces cuando me encontré con esos ojos oscuros y expresivos... por un instante la rapidez del reloj frenó para concentrarme en él, imaginando su soledad, su viveza, su valentía, creando quizás erradas historias; pero, sobretodo, inmersa en sus profundos ojos que sabían disfrutar, sonreír y soñar bajo unos acordes de guitarra...